Mi hermosa, mi pimpollo de luz, como te extraño
extraño como irradiabas la luz de Dios en todas mis ventanas,
como al instante sanabas mi corazón y mis hacías reír.
Cuando te vea de nuevo, mis lágrimas de felicidad
van a inundar las calles de esta ciudad de pobres corazones
y me voy a reír hasta retorcerme de alegría.
Quiero verte y abrazarte, eres una parte de mí
una extensión de mi cuerpo
no quiero parecer loca
es sólo una manera de actuar
Quiero que volvamos a estar juntas
para reírnos como locas
y que se enojen y vengan a callarnos
No hay comentarios:
Publicar un comentario